Por lo menos 60 millones de personas están bajo alerta invernal en puntos que van de costa a costa del país, desde el noroeste del Pacífico hasta Nueva Inglaterra. Se trata de un sistema de tormentas de movimiento rápido.
Robert Shackelford, meteorólogo de CNN, indica que se prevén hasta 12 pulgadas de nieve en Boston, un máximo de 6 en Washington, hasta 5 en Nueva York y unas cuatro pulgadas en Filadelfia.
Nieve, aguanieve y lluvia son parte de las causas de grandes embotellamientos en Tennessee y Kentucky, producto de una tormenta a medida que atravesaba los Apalaches con dirección al noreste de Estados Unidos y la región del Atlántico medio.
El jueves, Nashville reportó la caída de 6.3 pulgadas de nieve, por encima del récord de cuatro pulgadas para un 6 de enero, que se implantó en 1977, según el Servicio Meteorológico Nacional.
Para este viernes, se espera que la tormenta se intensifique precisamente en las horas de más tránsito vehicular, y en las primeras horas ya provocó la cancelación de unos 2,000 vuelos.
La zona fronteriza entre Tennessee y Alabama reportó también áreas cubiertas por aguanieve y lluvia helada.
Por su parte, la Policía Metropolitana de Nashville reportó decenas de accidentes automovilísticos y complicaciones al tránsito, por lo que hizo un llamado a no desplazarse ni salir de casa a menos que fuese estrictamente necesario.
Un panorama similar se registró en el condado de Montgomery, Tennessee, con docenas de choques, uno de ellos con saldo fatal, indicó el portavoz de la Patrulla de Carreteras del estado, teniente Bill Miller. Y aunque las autoridades aseguran que trabajan para limpiar los caminos, “los problemas continuarán a medida que la nieve siga cayendo y las temperaturas desciendan”, dijo la vocera regional del Departamento de Transporte local, Rebekah Hammonds.
Las clases fueron canceladas en las escuelas de Tennessee, y las oficinas de gobierno permanecerán cerradas, incluso hasta puntos más alejados como Memphis y el condado Shelby; estos dos puntos también están sufriendo por cancelación de vuelos.
En tanto, Andy Beshear, gobernador de Kentucky, declaró estado de emergencia y advirtió del peligro por las malas condiciones, luego de que en el estado se han reportado cientos de coches automovilísticos.
Beshear afirmó que ha desplazado a cuadrillas de la Guardia Nacional de Kentucky para poner manos a la obra ante el clima severo.
La ciudad de Nueva York, en tanto, ya activó su plan de clima invernal, que contempla unas 330,000 toneladas de sal, más de 700 esparcidores y unos 1,600 vehículos de arado listos para entrar en acción.
Una tormenta distinta causó nieve con efecto lago en partes de los Grandes Lagos.
Expertos advirtieron también de posibilidad de fuertes lluvias y nieve en las montañas para el noroeste del Pacífico. Se prevé que el aire frío se dirija en próximas horas al este, y se mantenga en la zona al menos hasta principios de la semana entrante.