El presidente, Joe Biden, firmó este viernes dos órdenes ejecutivas destinadas principalmente a acelerar la entrega de cheques de ayuda a las familias que más lo necesitan y aumentar la ayuda alimentaria para los niños que, en tiempos normales, dependen de las comidas escolares.
Biden busca, asimismo, despejar el camino para que los trabajadores federales tengan un salario mínimo de 15 dólares por hora.
Estas órdenes ejecutivas son una medida provisional para millones de familias mientras el Congreso evalúa su plan de alivio de 1.9 billones de dólares para ayudar a los afectados por la pandemia.
Biden remarcó que las familias no pueden esperar hasta que el nuevo paquete se apruebe ante las crecientes cifras de desempleo en todo el país.
“Tenemos que actuar”, enfatizó el presidente en una conferencia de prensa en la Casa Blanca. Agregó que los expertos coinciden que una intervención inmediata hará que Estados Unidos “salga fortalecido”.
Acelerar los cheques y ofrecer más ayuda para alimentos
La primera orden ofrece alivio económico temporal pidiendo que se amplíen programas federales de asistencia alimentaria para familias. “En todo el país, 1 de cada 7 hogares, y más de 1 de cada 5 hogares negros y latinos, está luchando para obtener los alimentos que necesitan”, dijo el presidente en su conferencia de prensa.
La orden pide al Departamento de Agricultura, por ejemplo, que aumente en un 15% un programa de asistencia alimentaria por el COVID-19 que proporciona ayuda nutricional a las familias con niños que normalmente tienen acceso a comidas gratuitas o a muy bajo costo en tiempos normales. Esta ayuda podría proporcionar a una familia con tres hijos más de 100 dólares de ayuda adicional cada dos meses.
En Estados Unidos, 29 millones de personas, 12 millones de niños, sufren dificultades para acceder a alimentos, según las estadísticas de la Casa Blanca.
También le pedirá a este departamento que amplíe el Programa de Asistencia Nutricional Suplementaria (SNAP, en inglés) — conocido comúnmente como cupones de alimentos— para incluir a las personas con los niveles de ingresos más bajos.
Las nuevas órdenes de Biden tienen en cuenta también las demoras que hay en la llegada de los 600 dólares de ayuda ya aprobados en el Congreso. Biden pide al Departamento del Tesoro que analice medidas para ampliar y mejorar la entrega de los cheques de estímulo, como el establecimiento de herramientas en línea para reclamar los pagos.
“Muchos estadounidenses tuvieron problemas para recibir la primera ronda de pagos directos y hasta ocho millones de hogares con derecho a ello no recibieron los pagos emitidos en marzo”, señala una hoja informativa de la Casa Blanca.
Aproximadamente dos millones de veteranos también pueden recibir ayuda pronto ya que se solicita al Departamento de Asuntos de Veteranos que considere detener los cobros federales por pagos en exceso y deudas.
Por un salario mínimo de 15 dólares
La segunda orden ejecutiva firmada por Biden ordena a la Administración comenzar a trabajar para requerir a las empresas que ofrecen servicios del Gobierno federal que paguen un un salario mínimo de 15 dólares la hora a sus empleados y licencia paga por enfermedad. El salario mínimo federal está en 7.25 dólares la hora desde 2009.
La medida revoca también órdenes firmadas por el expresidente Donald Trump, para que se restaure el poder de negociación colectiva, entre otras modificaciones.
Biden también pidió al Departamento del Trabajo que permita que los trabajadores que rechacen un empleo por temor a los riesgos de salud puedan optar a las prestaciones de desempleo.
Varios legisladores republicanos han manifestado su oposición a las disposiciones del plan de Biden relativas a los pagos directos a las personas, las ayudas a los Gobiernos estatales y locales y un salario mínimo de 15 dólares por hora en todo el país.
El desafío económico que enfrenta el presidente entrante, Joe Biden, se hizo aún más evidente el segundo día de su mandato cuando el Departamento del Trabajo informó que 900,000 personas pidieron por primera vez subsidios por desempleo, una cifra menor a la registrada la semana anterior, pero aun así es extraordinariamente alta en comparación con los números previos a la pandemia.
Con información de NBC News, AP, Reuters y CNBC.