Los contagios de coronavirus en Estados Unidos continúan en aumento mientras se acerca la temporada navideña, cuando las reuniones familiares y de amigos podrían incrementar aun más el número de casos.

El viernes, el país reportó un nuevo récord diario de casos confirmados cercano a los 228.000, lo que eclipsó la marca previa máxima de 217.000 fijada la víspera, de acuerdo con datos recabados por la Universidad Johns Hopkins.

El promedio para siete días de muertes atribuibles al COVID-19 en Estados Unidos rebasó 2.000 por primera vez desde la primavera, llegando a 2.011. Hace dos semanas, ese promedio era de 1.448. El viernes se reportaron 2.607 muertes por coronavirus en el país.

Varios estados reportaron números más elevados en la semana después del feriado del Día de Acción de Gracias, cuando millones de estadounidenses ignoraron las advertencias de los expertos de quedarse en casa y celebrar solamente con miembros de sus hogares.

En Arizona, los mensajes de las autoridades de salud tomaron un tono muy franco el sábado, cuando el estado reportó su segundo mayor incremento diario desde el inicio de la pandemia y el aumento de los contagios continuó elevando las tasas de ocupación de hospitales al borde de su máxima capacidad.

El Departamento de Salud de Arizona tuiteó que la población debería usar mascarillas estando “cerca de cualquiera que no viva en su hogar, incluso aquellos a quienes conocen y en quienes confían”.

Los 6.799 nuevos casos reportados el sábado en Arizona son menos solamente que los 10.322 registrados el martes, que según las autoridades incluyeron datos demorados por el fin de semana del feriado Día de Acción de Gracias. En la semana se registraron cuatro reportes diarios con más de 5.000 casos confirmados.

Carolina del Norte reportó el sábado un aumento récord de casos confirmados diarios: 6.018.

Por su parte, el departamento de salud de Indiana informó el sábado que 7.793 personas más en el estado habían sido diagnosticadas con coronavirus. Y Oklahoma reportó 4.370 nuevos casos de COVID-9 el sábado en un estado que ha promediado más de 3.000 contagios diarios en los últimos siete días.

Michigan reportó 9.854 nuevos casos confirmados el sábado, un marcado aumento en comparación con los más de 8.600 del viernes.

En Boise, Idaho, las fuerzas militares estaban priorizando a pacientes en el estacionamiento de una clínica de emergencias adaptada para recibir a los pacientes con coronavirus en medio de un aumento de infecciones y muertes en el estado.

Las autoridades de salud señalaron que los esfuerzos de Idaho para controlar el virus están fracasando.

El Valle de San Joaquin, en California, que enfrenta una severa escasez de camas de hospital, fue puesto en confinamiento total el sábado en una urgente medida para frenar el rápido aumento de las contagios. Gran parte del estado se encuentra al borde de restricciones similares.

AP