Las personas que contraen covid-19 después de recibir dos dosis de la vacuna podrían desarrollar una inmunidad aún mejor contra el virus, sugiere una nueva investigación.
Un estudio que examinó la sangre de 26 personas que tenían las infecciones posvacunación de covid después de la doble vacuna descubrió que desarrollaron anticuerpos hasta mil por ciento por ciento más efectivos y abundantes, lo que creó una forma de “superinmunidad”, dijeron los investigadores.
Aunque las vacunas contra el covid-19 son muy efectivas para prevenir casos graves o la muerte, no es raro que aquellas personas a las que se les aplica doble vacuna aún contraigan el virus, sobre todo variantes más transmisibles como delta u ómicron, y desarrollen síntomas leves.
Pero cuando los investigadores de la Oregon Health & Science University estudiaron la sangre de algunos de sus colegas que se habían recuperado de casos leves de covid a pesar de tener el esquema completo, encontraron que sus sistemas inmunológicos estaban bastante mejor preparados para vencer la enfermedad.
“No se puede obtener una mejor respuesta inmune que esta”, declaró el autor principal del estudio, Fikadu Tafesse, profesor asistente de microbiología molecular e inmunología en la Facultad de Medicina de la universidad.
“Estas vacunas son muy eficaces contra enfermedades graves. Nuestro estudio sugiere que las personas que se vacunan y luego se exponen a una infección posvacunación tienen superinmunidad”.
Los anticuerpos en la sangre de los participantes del estudio fueron más altos en número y mucho más efectivos, a veces hasta mil por ciento, que los anticuerpos generados dos semanas después de la segunda dosis de la vacuna Pfizer.
Los científicos creen que cualquier exposición al virus después de la vacunación sirve para fortalecer la respuesta inmunitaria, incluso ante variantes más nuevas.
“Creo que esto habla de un final eventual de todo esto”, consideró Marcel Curlin, profesor asociado de medicina en la Facultad de Medicina.
“No significa que estemos cerca del fin de la pandemia, pero indica dónde es probable que aterricemos: cuando alguien esté vacunado y luego expuesto al virus, tal vez se estará razonablemente bien protegido de futuras variantes”.
“Nuestro estudio implica que el resultado a largo plazo será una disminución de la gravedad de la epidemia mundial”, añadió.
Los científicos no hicieron pruebas contra la nueva variante ómicron, y los primeros estudios sugieren que dos dosis solas de vacunas como Pfizer, Astra-Zeneca o Moderna no brindan una protección tan buena como lo hicieron contra la variante delta.
Sin embargo, los científicos enfatizaron que una base de inmunidad de la vacunación es una parte esencial para protegerse contra el virus, y las personas no pueden solo confiar en una infección previa.
“La clave es vacunarse”, recalcó el profesor Curlin. “Hay que tener una base de protección”.
“Este es uno de los primeros [estudios] que muestra que una infección posvacunación genera una inmunidad más fuerte que la infección previa o la vacunación sola”, comentó a USA Today Monica Gandhi, de la University of California at San Francisco.
“Lo que decimos: sabemos que las cosas pasan. Si se está expuesto al virus, se tendrá una respuesta inmune asombrosa”, dijo el Dr. Tafesse al medio. “Refleja la respuesta de inmunidad que se obtiene con el refuerzo”, puntualizó.
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