Sarah McBride hizo historia en las elecciones de EE.UU. al convertirse en la primera senadora estatal abiertamente transgénero de la historia del país, tras lograr un escaño en la Cámara Alta del estado de Delaware.
McBride, que desempeñará su cargo en el Senado de ese estado de la costa este de EE.UU. y no en la Cámara Alta federal, será además la funcionaria transgénero de más alto rango del país norteamericano.
“Lo hemos conseguido, hemos ganado las elecciones. Espero que esta noche demuestre a un niño LGBTQ que nuestra democracia es lo suficientemente grande también para él”, dijo en un comunicado la nueva senadora estatal demócrata, que venció a su rival republicano por un amplio margen.
A sus 30 años, McBride lleva toda la vida entre la política y el activismo, y fue becaria en la Casa Blanca durante la Presidencia de Barack Obama (2009-2017).
Antes de ser elegida senadora en Delaware, la joven política ya había hecho historia al convertirse en 2016 en la primera persona abiertamente transgénero en dar un discurso en la Convención Nacional Demócrata, que en esa ocasión aupó como candidata presidencial a Hillary Clinton.
“Cualquiera que sea el mensaje que esta noche recibe la comunidad LGBTQ, ese no es un mensaje que esté mandando yo, sino que lo envían los votantes. Creo que eso es más importante que yo y todos debemos recordar”, concluyó McBride.
Además de elegir al presidente, los estadounidenses eligieron el martes a los 435 miembros de la Cámara de Representantes y renovaron un tercio de los cien escaños del Senado, así como a numerosos gobernadores y legisladores a nivel estatal.
Es en este último grupo en el que se encuentra McBride, que representará a un pequeño distrito urbano de la zona más norteña de Delaware en el Senado estatal.
Este artículo fue publicado por primera vez en Los Angeles Times en Español.