Los datos de WhatsApp se han convertido en un incómodo lastre con que nos vemos obligados a cargar en el móvil, y sobre todo cuando optamos por comprar uno nuevo y hay que migrar la copia de seguridad. Fotos, vídeos, memes, son alimentados diario por la infinidad de grupos y conversaciones en las que, muchas veces en contra de nuestra voluntad, nos vemos envueltos. Así, la copia de seguridad de la aplicación se ha convertido en una bola de nieve cada vez más grande y fuera de control. Gestionar el tamaño de la copia de seguridad, sobre todo desde que Google ha dejado de hacer gratuito el espacio que ocupaba el respaldo de WhatsApp en los móviles Android, se ha convertido en una necesidad imperiosa.
Por otro lado, tanto Google como Apple han encontrado en esa necesidad una fuente considerable de ingresos (y también una manera de retener a los usuarios). El problema es más acuciante para los propietarios del iPhone, ya que Apple apenas ofrece de forma gratuita unos exiguos 5 GB de espacio frente a los 15 GB de Google. Y a nada que uno sea un poco activo con la cámara del teléfono se puede ver abocado a pagar 2,99 euros al mes por su plan de 200 GB; Google da un poco más de oxígeno a sus usuarios con sus 15 GB gratuitos y con unos 100 GB por 1,99 euros al mes. Pero, ¿es realmente necesario pagar por tener un respaldo de WhatsApp de gran volumen?
A finales del año pasado, Google dio un serio disgusto a los usuarios de WhatsApp en Android: las copias de seguridad de la plataforma dejarían de ser gratuitas en 2024 y empezarían a descontar de los 15 GB gratuitos. De pronto, muchos se han encontrado con alertas de Google avisando que se están quedando sin espacio y debatiéndose si compensa pasar por caja o no. Hay una cuestión previa a esa decisión: ¿qué se está almacenando realmente en una copia de seguridad de WhatsApp? Si es voluminosa, podemos anticipar sin riesgo a equivocarnos que serán multitud de vídeos, memes y cientos de fotos sin interés las que están asfixiando el escaso espacio gratuito.
Esa es la buena noticia: eliminando el contenido multimedia nos podremos encontrar con copias de seguridad por debajo de 1 GB. Dicho de otra manera, quien no desee pagar por una suscripción, deberá hacer un poco de orden en la forma de utilizar esta popular aplicación de mensajería. Lo primero que hay que saber es que WhatsApp, por defecto, guarda en el móvil todas las fotos y vídeos que se reciben en conversaciones y grupos. Esto, además de plantear posibles conflictos de privacidad, aboca al usuario a tener que suscribirse a un plan de almacenamiento si desea seguir guardando todo.
Claves para liberar espacio
La buena noticia es que se puede evitar que la copia de seguridad de la aplicación crezca sin límites, simplemente desactivando el respaldo automático que hace la aplicación por defecto. Pero hay más medidas que se pueden adoptar para eliminar drásticamente el tamaño de la copia de seguridad de WhatsApp:
Limpieza de archivos innecesarios: WhatsApp permite gestionar y eliminar archivos que no necesitas conservar. Desde la aplicación, puedes acceder a ‘Ajustes > Almacenamiento y datos’ y revisar qué datos están ocupando más espacio (por lo general, suelen ser vídeos y fotos), para luego proceder a su eliminación. Esta función permite acceder por cada chat y grupo para ir seleccionando el contenido multimedia que sobra.
Configuración de descargas automáticas: Es, posiblemente, la solución definitiva para la mayoría de los usuarios: evitar la descarga automática de contenido multimedia en WhatsApp puede prevenir el almacenamiento excesivo de archivos no deseados. Desde ‘Ajustes’, se puede modificar esta opción para que archivos como videos y fotos no se descarguen automáticamente, reduciendo el volumen de datos que se guarda tanto en el móvil como en la copia de seguridad.
Salirse de determinados grupos: Puede parecer una solución de perogrullo, pero en muchas ocasiones, el grueso del ruido de WhatsApp proviene de grupos en los que nos han incorporado sin solicitarlo, o a los que en su día accedimos y ya no nos interesan. En estos grupos son frecuentes los vídeos, memes y demás archivos que terminan por engordar la copia de seguridad.
Borrar contenido de algunos chats: La aplicación permite borrar únicamente los contenidos de determinados chats, en la descripción del grupo (buscando en los archivos uno a uno los más pesados) o en Administrar el almacenamiento. Allí se ven las conversaciones que más ocupan y seleccionar las que queramos borrar o limpiar.
Calidad de los archivos: En Almacenamiento y datos, se puede configurar para que la calidad de los archivos descargados sea estándar y no en HD.
Guardar sin vídeos: A la hora de crear la copia de seguridad de tus chats y archivos de WhatsApp, en Ajustes>Chats, te ofrece la opción de no incluir los vídeos en esa copia de seguridad, que son el tipo de archivo que más espacio ocupa.
No mostrar en galería: Al entrar en cada uno de los chats, en la descripción del grupo, se puede editar la visibilidad de los archivos multimedia, para que no se descarguen automáticamente a la galería.
Qué hacer con las fotos y vídeos en WhatsApp
Es evidente que todas las medidas que adoptemos para adelgazar la copia de seguridad de WhatsApp serán útiles, pero no resuelven el problema para quienes quieran tener un respaldo completo de la app (incluyendo fotos y vídeos). Para resolver este problema de un plumazo y no perder ni una foto se puede aplicar un truco muy sencillo para los usuarios de Android: crear una cuenta de Gmail adicional en la que Google, fiel a su política por el momento, aplicará sus 15 GB de datos gratuitos. Para ello basta con ir a ‘Ajustes > Chats > Copia de seguridad’ y pulsar sobre ‘Cuenta de Google’ para seleccionar la nueva.
Los propietarios de un iPhone están obligados a utilizar iCloud y sus exiguos 5 GB gratuitos. Para estos segundos (y también extensible a Android), hay una forma, no automatizada, de no perder el contenido multimedia: emplear otro servicio de almacenamiento en la nube. Quien tenga una cuenta de Amazon Prime, por ejemplo, disfruta de un espacio cifrado e ilimitado en la nube para almacenar las fotos (y hasta 5 GB para los vídeos). Eso sí, su empleo conlleva cierta disciplina a la hora de utilizar WhatsApp: desactivar el guardado automático de fotos e ir guardando una a una las que nos interesen. Puede parecer laborioso, pero al final, se trata de adelantar una tarea que tarde o temprano deberemos emprender: poner orden a la fototeca.
Y quien no quiera volverse loco manteniendo su WhatsApp a raya, siempre puede optar por pagar el espacio extra que ofrecen tanto Google como Apple; eso sí, a sabiendas de que el tamaño de la copia de seguridad siempre será creciente y tarde o temprano, este espacio también se acabará agotando.
El País