Si bien se ha mencionado que hay escasez de trabajadores de la construcción en Estados Unidos, hoy en día la necesidad de contratar a más personas que presten su mano de obra para este rubro se hace cada vez más inmediata, ya que el área de la construcción y la mejora de viviendas nuevas está aumentando de manera acelerada.
Si bien es una industria que contaba con pocos trabajadores antes de la pandemia, ahora, a esta falta de mano de obra se suma la necesidad de incorporar de manera inmediata a 430,000 trabajadores durante este 2021 para que puedan responder a la demanda inmobiliaria que hay, en gran parte por que muchos estadounidenses siguen desempeñando sus funciones laborales desde su casa.
Esta información fue dada a conocer por la organización Constructores y Contratistas Asociados, quien además dijo que, durante los próximos dos años, para mantener al día en el mundo de la construcción se necesitarían sumar alrededor de 1 millón de personas.
Si bien el rubro de la construcción también sufrió golpes severos por el impacto de la pandemia del Covid-19, ya que tuvieron que detener operaciones cuando se decretaron los primeros confinamientos, se les permitió abrir casi en seguida ya que el gobierno estadounidense los calificó como esenciales. Sin embargo, según Constructores y Contratistas Asociados, durante ese tiempo, el sector perdió alrededor de 1 millón de trabajadores.
Y aunque la industria ha recuperado aproximadamente el 80% de su fuerza laboral, la realidad es que aún les faltan las manos de 238,000 trabajadores, según los propios datos del Departamento del Trabajo de Estados Unidos.
Datos proporcionados por la Oficina de Estadísticas Laborales señalan que un trabajador de la construcción puede llegar a ganar el doble, por hora, de lo que gana un empleado de cualquier otro ramo, como el de hotelería.
Por ejemplo, el sueldo aproximado de un empleado en un restaurante es de unos $18.23 dólares por hora, mientras que para el trabajador de la construcción es de $32.86 dólares por hora.
Aun así, parece que las personas siguen desinteresadas en aplicar para alguna vacante, pese a lo atractivo que puedan ser los salarios.
Los expertos coinciden en que el seguro de desempleo puede tener que ver, de alguna manera, ya que, al estar subsidiados, prefieren seguir recibiendo ese dinero del gobierno, que tener que salir a trabajar.
Sin embargo, hay quienes aseguran que no es por los beneficios de desempleo, sino porque debido a que gran parte de este sector está conformado por gente mayor, tienen miedo de contagiarse de coronavirus y que sea mortal.
Así que lo que ahora el gremio tiene que repensar es en las estrategias para lograr cubrir todas estas vacantes que la industria de la construcción necesitará en los próximos meses.