El director de la CIA dijo que habrá consecuencias si Rusia está detrás de los ataques del ‘Síndrome de La Habana’
La enfermedad afecta a diplomáticos y espías estadounidenses en todo el mundo
Los afectados y sus familiares han sufrido daños cerebrales graves y otras dolencias
El director de la CIA, William J. Burns, ha advertido de “forma confidencial” a los servicios de inteligencia de Rusia de que se “enfrentarán a consecuencias” si están detrás de los misteriosos incidentes de salud conocidos como “síndrome de La Habana”, que afectan a diplomáticos y espías de EEUU en todo el mundo.
Según publica este jueves The Washington Post, que cita fuentes diplomáticas conocedoras del caso pero bajo la condición del anonimato, la advertencia fue realizada durante la visita que Burns realizó a Moscú a comienzos de este mes, informó la agencia de noticias Efe.
El director de la CIA planteó esta cuestión a los responsables del Servicio Federal de Seguridad de Rusia (FSB), y al Servicio de Inteligencia Exterior ruso (SVR). Burns les dijo, según el Post, que provocar que el personal estadounidense y sus familiares sufrieran daños cerebrales graves y otras dolencias iría más allá de los límites del comportamiento aceptable para un “servicio de inteligencia profesional”.
La advertencia, según el diario, no llega a ser una acusación formal, pero si sugiere que Estados Unidos podría sospechar de una implicación de los servicios secretos de Rusia en relación a estos fenómenos que ha afectado la salud de varios funcionarios estadounidenses alrededor del mundo, de acuerdo con la agencia Efe.
Ni la CIA ni la embajada rusa en Washington han querido hacer comentarios al respecto, asegura el Post, mientras que Rusia ha negado en varias ocasiones que tenga algo que ver con estos incidentes. El objetivo principal del viaje de Burns a Moscú era avisar al Kremlin de que Washington estaba atento a la acumulación de tropas en la frontera de Ucrania y no toleraría un ataque militar contra ese país.
Más de 200 diplomáticos y familiares estadounidenses destinados en diferentes países han padecido síntomas del llamado “síndrome de La Habana”. El origen y el responsable de estos misteriosos “ataques” aún se desconoce, aunque algunos expertos apuntan que podría haberse usado energía de radiofrecuencia.
Agencias