BOGOTÁ (AP) — El presidente colombiano, Gustavo Petro, se comprometió el martes a “destruir” la corrupción que dice es “estructural” en el Estado, cuando lidia con un escándalo de presunta malversación de recursos en la compra de vehículos por una entidad de su gobierno.
“Ser de izquierda no es una vacuna contra la corrupción; ella está en todos los partidos y en todos los rincones. Nuestra labor y nuestro deber es luchar contra ella”, señaló en una alocución Petro, primer presidente de izquierda en el país andino, tras revelarse en la prensa local irregularidades en la Unidad Nacional para la Gestión de Riesgo y Desastres (UNGRD).
La Fiscalía adelanta una investigación por posibles actos de corrupción en la entidad, que tiene como misión atender a las poblaciones vulnerables afectadas por desastres naturales.
El escándalo de corrupción inició en medios colombianos al revelar presuntas irregularidades en la compra con presuntos sobrecostos de 40 carrotanques por cerca de 12 millones de dólares destinados para abastecer al desértico departamento de La Guajira, uno de los más pobres del país.
“La UNGRD es un caso de corrupción estructural y profesional; viene desde hace años, evaporando los dineros que son para las víctimas de tragedias”, señaló Petro, quien pidió a la Fiscalía no sólo investigar lo que ocurrió en su gobierno sino en los que le precedieron.
El caso ha generado consecuencias dentro del gabinete gubernamental. El presidente pidió la renuncia de Sandra Ortiz, consejera presidencial para las Regiones, por presuntamente estar involucrada en el caso y servir de enlace para pagar supuestos sobornos. La funcionaria indicó en su carta de renuncia que es inocente.
Además, Sneyder Pinilla, exempleado de la UNGRD, denunció en medios de comunicación que parte del dinero para la compra de los carrotanques habría ido a parar a las arcas personales del los presidentes del Congreso para que supuestamente favorecieran las reformas sociales que impulsa el gobierno.
El presidente del Senado, Iván Name, dijo el martes que es inocente y se negó a renunciar a su cargo como lo han pedido otros legisladores. “No recibí dineros ilícitos. Mi proceder democrático es contraevidente al de decir que los recibí en procura de favorecer una reforma que combatí enfáticamente”, señaló el político del partido Verde.
Por los señalamientos a Name han renunciado dos líderes al partido Verde, cuya principal bandera es la lucha contra la corrupción: la exalcaldesa de Bogotá y los excongresistas Antanas Mockus y Claudia López.