El director general de Stellantis, Carlos Tavares, presentó su renuncia después de casi cuatro años al frente de la automotriz, la cual es dueña de marcas como Jeep y Ram, en medio de una lucha continua con el desplome en las ventas.
El cuarto mayor fabricante de automóviles a nivel mundial anunció que su junta directiva aceptó la renuncia de Tavares el domingo. Dejará de inmediato su cargo como director general.
La compañía señaló el domingo que el proceso para nombrar un reemplazo está “bien encaminado”. En tanto, la automotriz afirma que se establecerá un nuevo comité ejecutivo interino, el cual estará encabezado por el presidente John Elkann.
Como jefe de PSA Peugeot, Tavares tomó la rienda de la compañía con sede en Holanda en enero de 2021, cuando se fusionó con Fiat Chrysler Automobiles. Sus operaciones en Norteamérica habían sido la principal fuente de ingresos de la compañía, pero Stellantis ha pasado dificultades este año en medio de los cambios en el mercado en general.
Stellantis registró una caída del 27% en los ingresos netos para su tercer trimestre ante las brechas en el lanzamiento de nuevos productos, mientras las accioones para reducir inventarios también redujeron en un 20% los envíos globales de nuevos vehículos.
El fabricante de automóviles reportó ingresos netos de 33.000 millones de euros (casi 36.000 millones de dólares) en el período de tres meses que terminó el 30 de septiembre, frente a los 45.000 millones de euros en el mismo período del año anterior. Salvo Sudamérica, el resto de las regiones reportaron caídas de dos dígitos en los ingresos, encabezadas por Norteamérica, donde los ingresos se desplomaron un 42% hasta los 12.400 millones de euros. Los ingresos en Europa cayeron un 12% hasta los 12.500 millones de euros.
Tavares había enfrentado presión en los últimos meses por parte de los concesionarios estadounidenses y del sindicato United Auto Workers después de dar a conocer desalentadores informes de desempeño financiero.
En Italia, los legisladores cuestionaron al exdirector ejecutivo sobre los planes de producción de la compañía en octubre, mientras el gobierno derechista del país acusaba a la compañía de trasladar plantas de ensamblaje a países de bajo costo.
Más allá de Jeep y Ram, el portafolio de Stellantis también incluye marcas como Chrysler, Dodge y Citroën.
AP