Los funcionarios de salud pública de Minnesota anunciaron este lunes lo que parece ser el primer caso conocido en el país de una cepa del coronavirus que fue detectada primero en Brasil, conocida como P.1.

El paciente con la variante P.1 es un residente de Minneapolis que se enfermó después de viajar a Brasil, dijo el Departamento de Salud de Minnesota.

La cepa se encontró entre las 50 muestras aleatorias analizadas cada semana como parte del programa de vigilancia de variantes del COVID-19 en el estado, según el departamento de salud.

La cepa que se descubrió en Brasil es una variación distinta de las observadas en Gran Bretaña y Sudáfrica y se cree que es más transmisible que la cepa de coronavirus que prevalecía al comienzo de la pandemia. Los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC, en inglés) también creen que esta cepa podría ser más resistente a los tratamientos con anticuerpos, parte del actual arsenal de los doctores contra el virus.

“La buena noticia es que podemos retrasar la propagación de esta variante y todas las variantes de COVID-19 mediante el uso de métodos de prevención probados y verdaderos como el uso de mascarillas, mantener la distancia social, quedarse en casa cuando se está enfermo y hacerse la prueba cuando sea apropiado”, dijo el lunes el comisionado de Salud de Minnesota, Jan Malcolm.

Los CDC han informado de al menos 195 casos en Estados Unidos de la variante que apareció en el Reino Unido. Esos informes provienen de al menos 22 estados, incluidos ocho en Minnesota. La variante que se esparció en Sudáfrica todavía no se ha descubierto en el país. La semana pasada, la Organización Mundial de la Salud instó a un mayor esfuerzo para detectar nuevas variantes.

Biden restableció el lunes las restricciones de viaje de COVID-19 para la mayoría de los viajeros que no son estadounidenses desde Brasil, el Reino Unido y Sudáfrica, a raíz de las nuevas cepas que han surgido.

La semana pasada, los científicos informaron señales preliminares pero preocupantes de que algunas mutaciones recientes pueden frenar modestamente la efectividad de dos vacunas actuales, aunque enfatizaron que las inyecciones aún ofrecen cierta protección contra la enfermedad.

También hay indicios de que algunas de las nuevas mutaciones pueden socavar las pruebas del virus y reducir la eficacia de ciertos tratamientos. Algunas pruebas sugieren que las variantes que se originaron en Sudáfrica y Brasil pueden ser menos susceptibles a los fármacos de anticuerpos o a la sangre rica en anticuerpos de los sobrevivientes de COVID-19, los cuales ayudan a las personas a combatir el virus.

A los funcionarios de salud también les preocupa que si el virus muta lo suficiente, las personas podrían contraer COVID-19 más de una vez. La reinfección es inusual, pero Brasil ha confirmado un caso de la nueva variante en alguien que se había enfermado con una versión anterior del virus varios meses antes.

Con información de NBC News y The Associated Press.