El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, ha hecho de la celebración de los resultados electorales anunciados por el Consejo Nacional Electoral (CNE) la madrugada de este lunes una reivindicación del ideario tradicional del chavismo, empezando por la noción de soberanía. El mandatario ha defendido su triunfo haciéndolo coincidir con el “respeto a la vida soberana de Venezuela” y el “respeto a la voluntad popular”, a pesar de las denuncias de irregularidades en el escrutinio presentadas por la oposición. “Puedo decir ante el mundo que soy el presidente reelecto de Venezuela”, ha clamado ante una concentración de fieles reunidos frente al Palacio de Miraflores. Maduro ha desestimado, además, los cuestionamientos de la oposición y ha asegurado que la demora en los resultados se debió a “un ataque masivo”, un hackeo, cuyos responsables han sido identificados. “Los demonios no querían que se totalizara y se diera el boletín oficial hoy”, ha remarcado.

El CNE dio el primer boletín pasada la medianoche, seis horas después del cierre de las mesas electorales. Elvis Amoroso, presidente del órgano electoral y uno de los fundadores del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), declaró que ya se habían escrutado el 80% de las mesas y que el actual mandatario obtenía el 51,2% de los votos frente al 44,2% de Edmundo González, el candidato de la unidad opositora. “Es contundente e irreversible”, comentó.

El retraso en el anuncio de los resultados desató una ola de críticas ante la falta de transparencia. Desde la oposición se insistía en que no les estaban facilitando el acceso a las actas para verificar los números. Sin embargo, Maduro se hizo eco del anuncio de Amoroso de que había habido un ataque al sistema de transmisión: “Venezuela sufrió un ataque en la noche. Un haqueo masivo. Ya sabemos de qué país viene. No lo voy a decir. Ya la huella quedó. Un hackeo masivo al sistema de transmisión del Consejo Nacional Electoral porque los demonios no querían que se totalizara y se diera el boletín oficial hoy. Sabemos dónde lo hicieron y quién lo ordenó. Queda en manos de la Fiscalía de la República hacer la investigación y hacer justicia para nuestro pueblo”. Asimismo, ha asegurado que hubo intentos de quemar centros de votación y que los responsables han sido capturados.

Maduro, pese a la opinión mayoritaria y ante la ola de críticas que se avecinaba, ha insistido en que su país “tiene un poder electoral de altísimo nivel de confianza y transparencia”. “16 auditorías se le hacen. ¿Díganme en qué países se le hace una auditoria al sistema electoral? ¿En qué país se revisa para asegurarlo?”, ha remarcado. “Pido respeto a la Constitución, a los poderes públicos, y a la vida soberana de Venezuela. Respeto a la voluntad popular. Hay que ver qué país del mundo, después de recibir 930 sanciones criminales, de haber sufrido lo que hemos sufrido, se atreve a convocar elecciones”, ha insistido.

El mandatario no ha escatimado críticas a la oposición. “Hay que agradecer al pueblo de Venezuela su tenacidad y perseverancia. Tremenda regla psicológica que le metieron. Todas las redes sociales en contra y campañas diarias para favorecer a los demonios y las demonias, pero pudo más el pueblo”, ha señalado en contraposición a los chavistas, que ha descripto como “personas llenas de patriotismo y cristianismo”. Sin embargo, ha asegurado que convocará “a un gran diálogo de entendimiento de base nacional y de nuevos consensos” con todos los sectores. Esto ya ha sucedido en otras ocasiones y, según denunció en el pasado la líder opositora María Corina Machado, solo ha servido para desmovilizar a sus contradictores y buscar legitimidad.

La memoria de Hugo Chávez, el fallecido fundador de la revolución bolivariana, no estuvo ausente en la celebración. “Siempre desde muy joven creí en la revolución socialista. Cuando el comandante Chávez surgió, no dudé ni un segundo en seguirlo”, ha relatado el mandatario. Ha evocado el día en el que Chávez, enfermo de cáncer, lo designó como su sucesor. “Yo hasta donde pude hablar le dije: ‘Comandante, le juro que yo seré leal más allá de esta vida y protegeré al pueblo de Venezuela que usted tanto ama”, ha rememorado. Le ha dedicado, además, el triunfo: “No te hemos fallado, jamás te fallaremos. Estamos de pie y victoriosos”.

Ataques a Javier Milei

También ha utilizado una parte importante de su discurso para atacar al presidente argentino, el ultraderechista Javier Milei. “Ya ha surgido el club de fascistas de América Latina. Milei, te digo: no me aguantas ni un round. Bicho cobarde. Traidor de la patria. Eres un tronco de fascista. Ya este pueblo dijo no al capitalismo salvaje, no al fascismo”, exclamó, antes de continuar su andanada contra Milei: “Debe estar reventándose con su cara de monstruo, porque es un tipo feo también. Es un sociópata, sádico, que disfruta haciendo hacer sufrir al pueblo de Argentina”.

En su celebración del triunfo, Maduro clamó que “el fascismo en Venezuela, tierra de Bolívar y Chávez, no pasará. Ni hoy ni nunca”, en clara referencia a la oposición, a la que ligó una y otra vez con la derecha más radical de la región, especialmente con la Argentina de Milei. Ha asegurado que Venezuela está lista “para seguir su destino glorioso” y que su reelección preservará “la construcción de una sociedad alternativa al capitalismo salvaje”. “Es el triunfo de las ideas de la igualdad”, ha concluido.

El País