Cientos de niños migrantes que han llegado a la frontera sur de Estados Unidos en los últimos meses han dado positivo a la prueba de la COVID-19, según confirmaron autoridades esta semana.
En un explosivo reportaje publicado por el sitio Axios se revela que cerca de 2,900 los menores llegados a albergues -muchos de ellos sin la compañía de familiares o mayores de edad- han sido identificados como portadores del coronavirus. 319 de ellos se encuentran actualmente bajo custodia de las autoridades o en cuidados médicos.
Dicha publicación cita a portavoces del Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS, por sus siglas en inglés). Según se indica actualmente hay más de 11,500 menores de edad bajo custodia de dicha agencia en distintos albergues de la frontera con México. Esto significaría que de ellos el 3% padecen de COVID-19.
En marzo 24 comenzaron a aplicarse pruebas para detectar el virus entre los menores que han ingresado a 200 albergues o centros de detención en 22 estados, se afirma. De las aproximadamente 40,000 pruebas aplicadas 2,897 dieron positivo y 2,578 menores fueron reubicados en centros médicos o clínicas, afirmaron portavoces de la HHS a Axios.
Una fuente de dicha agencia contó que en cuanto los menores llegan a dichos centros se les practica la prueba para detectar la presencia del virus y de dar positiva se les aísla de inmediato para que reciban cuidados médicos las 24 horas.
El reporte muestra una preocupante tendencia pues justo hace un año la Oficina de Reasentamiento de Refugiados -que forma parte de la HHS- confirmaba que tres niños migrantes habían dado positivo a la COVID-19 , exponiendo así cómo se ha propagado el virus tanto en la frontera, como en las comunidades de dónde provienen los menores.
La administración de Joe Biden ha recibido criticas tras la reapertura de un centro de detención para niños y adolescentes inmigrantes en Texas. La vocera de la Casa Blanca Jen Psaki dijo que tuvieron que tomar esta “difícil decision” de abrir este centro para poder seguir con las medidas de seguridad y distanciamiento social por la pandemia durante esta creciente ola de inmigrantes menores de edad llegando sin adultos.
PEE