El alcalde de Chicago llamó este jueves a sus habitantes a realizar un nuevo confinamiento en casa a partir del 16 de noviembre, cuando esta ciudad, la tercera más grande de Estados Unidos, enfrenta un aumento de los casos de covid-19.

“Estoy emitiendo un aviso de permanencia en casa, pidiendo a todos los habitantes de Chicago que sólo salgan de sus casas para las necesidades esenciales, incluyendo el trabajo y la escuela”, dijo Lori Lightfoot.

El alcalde solicitó además a sus habitantes que no tengan invitados en sus casas, que cancelen las celebraciones de Acción de Gracias y que eviten los viajes.

Este anuncio en Chicago (Illinois, centro-este) se produce mientras Estados Unidos, el país más enlutado del mundo por la pandemia con 242.073 muertos y más de 10,44 millones de casos, vive su tercer y peor pico de contagios.

El Condado de Cook, al que pertenece Chicago, registra 91,6 nuevos casos diarios por cada 100.000 habitantes en un promedio de siete días, según datos compilados por el Instituto de Salud Global de Harvard.

Cuando las cifras superan los 25 casos por cada 100.000 habitantes se considera una “zona roja”, indicando los niveles de riesgo más altos.

“Cada uno de nosotros debe dar un paso adelante y ‘Proteger a Chicago’ ahora mismo, o el 2020 podría ir de mal en peor, con decenas de miles de infecciones más, un sistema de salud desbordado y otros 1.000 habitantes de Chicago muriendo por covid-19 para finales de año”, indica una nota del sitio web de la ciudad.

El estado de Illinois reportó 12.657 nuevos casos y 145 muertes el miércoles, para un total de 523.840 casos y 10.434 muertes.

En su sitio web, aconseja a los residentes del estado que permanezcan en sus casas durante las próximas tres semanas, “saliendo sólo para las actividades necesarias y esenciales, como los empleos que deben realizarse fuera de casa, las pruebas de covid-19, así como compras de farmacia y comestibles”.

AFP