OMAHA, Nebraska, EE.UU. (AP) — El inversionista Warren Buffett continuó con su tradición del Día de Acción de Gracias al entregar el lunes más de 1.100 millones de dólares en acciones de Berkshire Hathaway a cuatro fundaciones de su familia, y ofreció nuevos detalles sobre quién distribuirá el resto de su fortuna después de su muerte.
Buffett ha dicho anteriormente que sus tres hijos distribuirán su fortuna restante de 147.400 millones de dólares en los 10 años posteriores a su fallecimiento, pero ahora también ha designado sucesores para ellos, ya que es posible que los hijos de Buffett mueran antes de haberlo distribuido todo. No identificó a los sucesores, pero dijo que sus hijos los conocen a todos y están de acuerdo en que serían personas adecuadas.
“El tiempo siempre gana. Pero puede ser caprichoso —de hecho injusto e incluso cruel—, a veces poniendo fin a la vida al nacer o poco después, mientras que, en otras ocasiones, aguarda un siglo o más antes de hacer una visita”, dijo Buffett, de 94 años, en una carta a sus compañeros accionistas el lunes. “Hasta la fecha he tenido mucha suerte, pero en poco tiempo, antes de que me dé cuenta, él llegará por mí. Sin embargo, hay un inconveniente en mi buena suerte en evitar que se fije en mí. La esperanza de vida prevista para mis hijos ha disminuido considerablemente desde la promesa de 2006. Ahora tienen 71, 69 y 66 años”.
Buffett dijo que todavía no tiene interés en crear riqueza dinástica en su familia, un punto de vista compartido por su primera esposa y la actual. Reconoció haber dado millones a lo largo de los años a Howard, Peter y Susie, pero ha dicho desde hace tiempo que cree que “los padres extremadamente ricos deberían dejar a sus hijos lo suficiente para que puedan hacer cualquier cosa, pero no tanto como para que no puedan hacer nada”.
En la actualidad, Buffett continúa encabezando Berkshire Hathaway como presidente y director general y no tiene planes de retirarse, aunque ha entregado a otros la mayoría de las tareas de gestión diaria de las docenas de empresas del conglomerado. Eso le permite concentrarse en su actividad favorita de decidir dónde invertir los miles de millones de dólares de Berkshire. Uno de los subordinados de Buffett, Greg Abel —que ahora supervisa todas las empresas no aseguradoras— está listo para asumir el cargo de director general después de la muerte de Buffett.