LONDRES (AP) — El Banco de Inglaterra redujo su tasa de interés principal en un cuarto de punto porcentual el jueves después de que la inflación en el Reino Unido cayera por debajo de su tasa objetivo del 2%.
El banco indicó que su panel de fijación de tasas redujo la tasa de referencia al 4,75% — su segundo recorte en tres meses — aunque su gobernador, Andrew Bailey, advirtió que las tasas de interés no bajarán demasiado rápido en los próximos meses.
“Debemos asegurarnos de que la inflación se mantenga cerca del objetivo, por lo que no podemos reducir las tasas de interés demasiado rápido ni en exceso”, dijo. “Pero si la economía evoluciona como esperamos, es probable que las tasas de interés continúen disminuyendo gradualmente desde aquí”.
En el año hasta septiembre, la inflación en el Reino Unido se situó en el 1,7%, su nivel más bajo desde abril de 2021 y por debajo de la tasa objetivo del 2% del banco central.
Los bancos centrales de todo el mundo aumentaron drásticamente los costos de endeudamiento desde casi cero durante la pandemia de coronavirus cuando los precios comenzaron a dispararse, primero como resultado de problemas acumulados en la cadena de suministro y luego debido a la invasión a gran escala de Ucrania por parte de Rusia, lo que incrementó los costos energéticos.
A medida que las tasas de inflación han caído recientemente desde máximos de varias décadas, los bancos centrales han comenzado a reducir las tasas de interés. Se espera también que la Reserva Federal de Estados Unidos reduzca las tasas de interés más tarde el jueves.
Los economistas han advertido que las preocupaciones sobre el futuro camino de los precios tras el presupuesto de aumento de impuestos de la semana pasada del nuevo gobierno Laborista y el impacto económico del presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, pueden limitar el número de recortes el próximo año.
La decisión llega una semana después de que la jefa del Tesoro, Rachel Reeves, anunciara alrededor de 70.000 millones de libras (90.000 millones de dólares) de gastos adicionales, financiados mediante el aumento de impuestos a las empresas y el endeudamiento. Los economistas piensan que el derroche, junto con la perspectiva de que las empresas amortigüen los aumentos de impuestos subiendo precios, podría llevar a una inflación más alta el próximo año.
La decisión sobre la tasa también llega un día después de que Trump fuera declarado ganador de las elecciones presidenciales de Estados Unidos. Ha indicado que reducirá los impuestos e introducirá aranceles sobre ciertos bienes importados cuando regrese a la Casa Blanca en enero. Ambas políticas tienen el potencial de ser inflacionarias tanto en Estados Unidos como a nivel global, lo que incitaría a los responsables de políticas del Banco de Inglaterra a mantener las tasas de interés más altas de lo inicialmente planeado.
