Durante su campaña presidencial, Donald Trump aseguró que impondría o aumentaría los aranceles a los productos que ingresan a los Estados Unidos desde países como México, Canadá y China. Después de ganar las elecciones, el republicano señaló que, en su segundo mandato en la Casa Blanca, haría válidas sus promesas.

“El 20 de enero, como una de mis primeras órdenes ejecutivas, firmaré todos los documentos necesarios para cobrar a México y Canadá un arancel del 25% sobre TODOS los productos que ingresan a los Estados Unidos y sus ridículas fronteras abiertas. ¡Este arancel permanecerá en vigor hasta que las drogas, en particular el fentanilo, y todos los inmigrantes ilegales detengan esta invasión de nuestro país!”, compartió Trump a finales de noviembre en Truth Social.

La medida no entró en vigor el 20 de enero, el primer día de su segundo mandato. No obstante, el presidente Trump aplicará aranceles del 25% a las importaciones de México y Canadá a partir del 1 de febrero, así como un arancel del 10% a las importaciones de China, compartió la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Karoline Leavitt en una reunión informativa.

Aunque los aranceles se aplicarán a estos tres países, millones de familias en Estados Unidos se verán afectadas, ya que como han explicado varios expertos y economistas, los consumidores pagan los costos extras de los aranceles y el conflicto comercial.

Alrededor de 40 millones de familias de Estados Unidos, asegura Marcelo Ebrard

El Secretario de Economía explicó este 31 de enero, durante la conferencia de la Mañanera del Pueblo, que los aranceles que la administración Trump impondrá a los productos mexicanos afectará a millones de familias en Estados Unidos, ya que los principales productos que México exporta a la unión americana son automóviles, autopartes, computadoras, televisores y refrigeradores.

“Entonces, si esta tarifa se impusiera, sus consumidores van a enfrentar precios más altos, y esto sí para todos y también para supermercados que son: frutas, verduras, carne y cerveza”, dijo el funcionario.

Ebrard también explicó que las empresas estadounidenses también se verán afectadas, ya que las cadenas de suministros sufrirán afectaciones. De acuerdo con el Secretario de Economía, en la industria de automóviles y autopartes, alrededor de 12 millones de familias norteamericanas sufrirán el alza en los aranceles.

Por otro lado, en el sector de la computación 40 millones de familias se verán afectadas. En cuánto a las pantallas, 32 millones de familias tendrán que pagar más por las medidas arancelarias. Ebrard agregó que California, Texas, Florida y Arizona serán los estados más afectados.

Varios economistas han señalado que los aranceles son pagados por los consumidores. “Un estudio tras otro han demostrado que los aranceles estadounidenses aplicados desde 2017 han sido transferidos en su totalidad a los compradores estadounidenses”, señala Kimberly Clausing y Mary Lovely, economistas del Peterson Institute for International Economics (PIIE), un centro de investigación independiente con sede en Washington D.C, de acuerdo con BBC Mundo.

AS