Durante una presentación digital, AMG (no tenemos que recordarte que es el brazo deportivo de Mercedes-Benz) presentó en que consistirán los futuros trenes de rodaje de sus próximos modelos deportivos, los cuales, como se sabía, llevarían tecnología híbrida. La era de los brutales motores V8 aspirados o los motores supercargados, dio pie a una camada de motores turbocargados cada vez más pequeños.
La guinda de la torta en cuanto a esos desarrollos, llegó con el motor Turbo de dos litros que emplea el A45s AMG y que alcanza más de 400 Hp de potencia. Y AMG le metió mucho cariño a ese motor, porque sabían que estaban desarrollando algo importante para más adelante. Y claro, porque ese mismo motor, con ayuda híbrida, puede ser igual o más potente que los V8 de cuatro litros que llevan los AMG más potentes de la actualidad.
Al margen de los motores híbridos, AMG también se encargará de desarrollar versiones de alto desempeño de la familia EQ, modelos que junto con los híbridos, serán los dos pilares fuertes donde se sostenga la futura gama de modelos de AMG. Todo esto, al margen, por supuesto, del Proyect ONE Hypercar, el auto que hará de puente entre la F1 y los modelos de producción.
E-Performance: los nuevos híbridos
Estos nuevos modelos combinarán motores AMG de cuatro cilindros o V8, con un motor eléctrico de excitación constante, una batería de alto desempeño desarrollada en casa (Affalterbach) y el ya conocido sistema AWD de tracción a las cuatro ruedas (AMG Performance 4MATIC+). Estos autos obviamente se pueden enchufar para mantener sus baterías siempre con energía.
El motor eléctrico, que según AMG puede alcanzar hasta 150 kW y 236 libras-pie de torque, va instalado en el eje trasero, junto a una transmisión de dos velocidades y un diferencial de bloqueo electrónico, todo junto integrado en una sola unidad compacta.
Este motor trabaja independientemente de la caja automática del auto (la 9G-Speedshift), lo que significa que su entrega de potencia es aún más inmediata, al no estar comprometida directamente a otro componente.
Las baterías van encima de esta unidad. Esto significa que hay un mejor reparto de pesos
Cuando hay perdidas de tracción, el motor trasero puede enviar potencia al eje delantero para mejorar la estabilidad y respuesta.
La transmisión de dos velocidades, permite una mayor eficiencia en la entrega de torque. Solo para que sepas, la “segunda” se pasa por sobre los 140 km/h, correspondiendo a la máxima velocidad a la que pueden girar los motores eléctricos, que son 13,500 RPM.
Este tren motriz fue desarrollado para ser modular, o sea podremos verlo en varios autos y quizás, con distintas especificaciones.
Según AMG, este sistema eléctrico, en su configuración máxima podría alcanzar hasta 600 kW de potencia y más de 738 libras-pie de torque.
Baterías con experiencia sacada de la F1
AMG traspasó mucha de la experiencia obtenida con las baterías que emplean los monoplazas de Bottas y Hamilton. Aprendieron varias cosas, que hoy en día son sabidas, pero que no todas las marcas pueden lograr. Por ejemplo, que las baterías en un auto de alto desempeño tienen un ritmo de carga y descarga mucho más alto, lo que obviamente fatiga este componente. Lo segundo, es que las baterías tienen un rango de temperatura óptimo para trabajar y que cualquier rango de temperatura superior o inferior, degrada su performance y su vida útil.
Este paquete de 560 celdas y 400v cuenta con una capacidad de 6.1 kWh, puede ofrecer 70 kW de potencia continua y un peak de 150 kW sostenido por 10 segundos. Pesa 89 kilos y tiene una densidad de 1.7 kW/kg. La idea es que pueda absorber energía de manera muy rápida y pueda desplegar energía de manera instantánea pero de manera sostenida.
Pero el desarrollo más importante es un sistema de refrigeración único en el segmento, porque este refrigera directamente todas las celdas del paquete de baterías con un refrigerante de alta tecnología y basado obviamente en un líquido no conductivo. Con ayuda de una bomba eléctrica, se asegura el flujo de 14 litros de refrigerante, el que también se ayuda de un radiador de aceite/agua, que logra evacuar parte del calor al radiador frontal. En resumen, esto significa que las baterías trabajan constantemente a una temperatura de 45 grados Celsius sin importar que tan dura sea la demanda y es algo que AMG ha logrado comprobar con largas pruebas de fiabilidad… o al menos es lo que ellos dicen.
Las baterías recuperan energía en cuatro modos, siendo 0 el más débil y 3 el más fuerte (similar al sistema i-Pedal de Nissan o BMW) y que puede recuperar hasta 90 kW con tan solo soltar el acelerador.
Autocosmos