Después de meses de retraso y sobre el filo de las celebraciones de fin de año, el Congreso se apresta finalmente a votar este lunes un paquete de estímulo económico ante la pandemia de 900,000 dólares, con una nueva ronda de cheques para familias y dinero para empresas, mientras Estados Unidos padece un aumento descontrolado de casos y muertes por COVID-19.
Los congresistas llegaron a un acuerdo sobre el contenido del paquete el fin de semana, tras días de tensas negocaciones.
Junto con la medida de alivio ante el COVID-19, se espera que se apruebe este lunes también el presupuesto federal para evitar un cierre de Gobierno. Los legisladores tienen plazo hasta la medianoche para hacerlo realidad.
El texto aún no se ha publicado pero se dio a conocer que los nuevos cheques de hasta 600 dólares tendrán los mismos requisitos que los aprobados en primavera.
¿Quiénes los recibirán?
Quienes ganen hasta 75,000 dólares al año.
Quienes tengan hijos recibirán pagos extra de 600 dólares por cada uno de ellos (deben ser dependientes menores de 17 años).
¿Cuándo llegarán?
De ser aprobados, los nuevos pagos directos se enviarán tan pronto como la semana próxima, dijo este lunes el secretario del Tesoro, Steven Mnuchin, de acuerdo con The Washington Post. En la primavera, tardaron dos semanas.
En esta oportunidad, el cheque sí incluirá a los ciudadanos que están casados con inmigrantes indocumentados (que no tienen un número de seguro social), aproximadamente 1,2 millones de individuos que fueron excluidos de la primera ronda de cheques de 1,200 dólares. Se trata de los estadounidenses que presentaron una declaración de impuestos junto con una persona que usa un número de identificación de contribuyente individual, en lugar de un número de seguro social.
Los 11 millones de desempleados que ha dejado la crisis económica del país también contarán con un alivio: se extienden los beneficios por desempleo, que vencen este 26 de diciembre, y se agrega un bono adicional de 300 dólares por semana.
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Las empresas y negocios que están luchando para poder subsistir, pagar el alquiler y a sus empleados, podrán solicitar además prestamos al Gobierno federal. Para ello, se incluyó un fondo de 284,000 millones de dólares, reviviendo el llamado Programa de Protección de Cheques de Pago con subvenciones para empresas.
Para hacer frente a la pandemia, el Gobierno federal destinará además 69,000 millones en fondos para realizar pruebas del coronavirus y para la distribución de vacunas. Hasta ahora, se ha aprobado el uso de emergencia de dos vacunas, de Pfizer y Moderna, y la campaña de vacunación ha empezado en todo el país para trabajadores esenciales y personas con alto riesgo.
La crisis económica que se desató en la primavera ha dejado tambaleando a todos los sectores y a millones de familias al borde de la pobreza. La nueva ley de estímulo incluye como respuesta 13,000 millones en fondos para asistencia alimentaria y 10,000 para el cuidado infantil.
Hay además fondos específicos para universidades y escuelas, 82,000 millones, y para teatros, cines independientes y otras instituciones culturales, 15,000 millones, según el acuerdo bipartidismo alcanzado el domingo.
Con la parálisis de la economía y la pérdida masiva de trabajos, el pago de la renta ha sido una de las principales preocupaciones de las familias estadounidenses, en especial para la comunidad latina. Los demócratas lograron incluir 25,000 millones de dólares en ayudas para el pago del alquiler y una extensión de la moratoria de desalojo que vencía a final de año.
El paquete excluyó, sin embargo, cientos de miles de millones de dólares para estados y localidades, como así también fondos para Medicare, el plan de salud del estado, y maestros y trabajadores de emergencias que se han enfrentado a dificultades financieras durante la pandemia.
Los republicanos no lograron, por su parte, agregar una protección de responsabilidad ante la pandemia para empresas, universidades y centros de atención médica, para que no puedan ser demandadas.
El nuevo paquete será un alivio de emergencia y momentáneo, hasta el primer trimestre de 2021. El presidente electo, Joe Biden, y los líderes de ambos partidos han dicho que tienen la intención de revisar este paquete el año próximo.
La presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, demócrata por California, lo llamó un “primer paso”.
“Esta es una muestra del gran desafío de trabajo que tendrá por delante nuestra nación”, dijo Biden el domingo en un comunicado.
Las negociaciones llevan meses, pero se intensificaron en los últimos días y horas, ya que el Congreso también debía aprobar el presupuesto federal para 2021, con un proyecto en discusión de 1.4 millones de dólares para lo que queda del año fiscal.
Telemundo
