Donald Trump regresa a la Casa Blanca en enero. A medida que el gran día se acerca, su equipo de transición trabaja en el plan para una de sus principales promesas de campaña: la deportación masiva de inmigrantes indocumentados. Durante el primer mandato del republicano (2017 – 2021), se deportaron a alrededor de 935,000 inmigrantes irregulares.

Para su segunda administración, Trump prometió deportar entre 15 y 20 millones de inmigrantes. Entre las medidas a tomar para lograr su objetivo, se encuentra la deportación de migrantes a países diferentes, en caso de que sus países de origen se nieguen a aceptarlos de vuelta. Según informaron fuentes con conocimiento en el tema para NBC News, la lista incluye países como Turcas y Caicos, Bahamas, Panamá y Granada, entre otros.

Bajo esta línea, millones de migrantes podrían ser desplazados, de manera permanente, a países donde el idioma, la cultura y la gente es diferente a lo que conocen. Si bien la medida ya desató un debate, no es la primera vez que Trump deporta inmigrantes a países diferentes a los de su origen.

En 2019, durante su primer mandato, el republicano deportó a miles de migrantes de diversos países a Guatemala, como parte de un acuerdo de solicitud de asilo. En aquel momento, varios grupos en defensa de los derechos de los migrantes demandaron al republicano. La demanda sigue pendiente en un tribunal federal, según informa Telemundo.

Así es como Trump podría obligar a otros países a recibir migrantes

De momento, se desconoce qué tipo de acuerdos o presión vaya a ejercer Trump para que un tercer país acepte a los inmigrantes. No obstante, expertos en el tema sugieren que el republicano podría usar un recurso para prácticamente obligarlos: los visados.

“Su Gobierno puede condicionar la concesión de visas a ciertos países a que acepten a recibir a personas deportadas por Estados Unidos. Así lo establece la Ley de Inmigración y Nacionalidad (INA, por sus siglas en inglés) y lo recoge el Proyecto 2025, la agenda conservadora de la cual Trump intentó distanciarse durante la campaña electoral”, explican expertos de El País.