CIUDAD DE MÉXICO (AP) — La nueva presidenta de México, Claudia Sheinbaum, anunció el martes un plan de agricultura que podría hacer que la producción y distribución de alimentos en el país sea como la de la década de 1980, cuando las comidas en México estaban dominadas por las tortillas, los frijoles, el café instantáneo y el chocolate caliente barato.
Hace cuatro décadas, los ingredientes de esos alimentos a menudo eran adquiridos en tiendas gubernamentales que tenían algunos productos básicos.
La presidenta Sheinbaum prometió el martes revivir esas tiendas gubernamentales a menudo en mal estado y con productos limitados y seguir con las labores para lograr la “soberanía alimentaria”.
“Es producir lo que consumimos”, dijo Sheinbaum sobre la política, cuyo principal enfoque será aumentar la producción de frijoles y maíz.
Sheinbaum parece tener un profundo interés en impulsar la producción y consumo de frijoles. El lunes, comentó que es “mucho mejor comer un taco de frijoles que una bolsa de papas”.
El secretario de Agricultura, Julio Berdegué, dijo que el enfoque será garantizar precios para los agricultores que cultiven el maíz utilizado para las tortillas y reducir el costo de las tortillas un 10%, luego de que los precios han subido en los últimos años.
El gobierno pretende impulsar la producción de frijoles un 30% en seis años para reemplazar las importaciones y creará centros de investigación para suministrar semillas de mayor rendimiento.
“La autosuficiencia en frijol es una meta que nos ha puesto la presidenta”, comentó Berdegué.
El gobierno mexicano también se centrará en apoyar la producción de café, pero principalmente para el café instantáneo, que, según afirma, es utilizado en el 84% de las viviendas mexicanas. El plan también buscará apoyar la producción de cacao, pero principalmente para el chocolate en polvo, no para barras de chocolate fino.
Las políticas parecen ir en contra de las tendencias del mercado y de cómo son las ventas de comida mexicana hoy en día, cuando el consumo de la mayoría de los productos básicos tradicionales ha disminuido.
Gran parte de los mexicanos compra hoy en día en modernos supermercados y el consumo de café recién molido, no instantáneo, ha aumentado enormemente, acompañado por un auge de cadenas y tiendas especializadas en café.
Mientras tanto, el consumo de frijoles ha caído estrepitosamente durante décadas en México. De acuerdo con el reporte gubernamental “Panorama Agroalimentario 2024”, el mexicano consume apenas 7,7 kilogramos (17 libras) de frijoles al año, comparado con 16 kg (35,2 libras) que consumía al año en la década de 1980.
Una combinación de factores, incluido el tiempo que tarda cocinar los frijoles, podrían estar detrás de esa tendencia. Amanda Gálvez, investigadora de la Universidad Nacional Autónoma de México, escribió que “al frijol lo menospreciamos al pensar en él como ‘comida de pobres’ y estamos cometiendo un gravísimo error”, debido a que los frijoles son buena fuente de proteína.
El consumo de tortilla también ha disminuido desde los 100 kg (220 libras) per cápita al año en el 2000 a unos 75 kg (165 libras) en 2024. Los consumidores compran cada vez más productos de panadería en lugar de tortillas.